viernes, 22 de abril de 2022

El México en el que vivimos

 

No había escrito en este blog desde agosto de 2019. Hace casi 3 años fue mi última entrada. Por supuesto que en ese lapso muchísimas cosas han cambiado; el ambiente político de México se ha radicalizado, la división en nuestro país impera como nunca antes, pero para efectos de volver a sentarme a escribir estas líneas, el motivo es muy simple: la frustración, impotencia y enojo que estoy sintiendo.

 Para nadie es secreto que México lleva ya demasiados años sumergido en una vorágine de violencia en todos los aspectos posibles pero, sobre todo, se ha vuelto muy visible la violencia en razón de género. Hoy es justo esa violencia que me lleva a escribir de nueva cuenta.

 ¿En qué clase de país estamos viviendo? ¿Hasta cuándo terminará la violencia? ¿Cuándo será el día en que las autoridades, realmente, hagan su trabajo?

 El día de ayer fue encontrado el cuerpo sin vida de una mujer, abandonado en una cisterna de 4 metros de profundidad, en las inmediaciones de los lugares donde, en reiteradas ocasiones, se había llevado a cabo la búsqueda de Debanhi Escobar. Encontraron este cuerpo 13 días después de la desaparición de la joven de apenas 18 años. Aun cuando falta que las autoridades se expresen de manera oficial, utilizando los medios correspondientes para confirmar si se trata o no de Debanhi, su padre ya confirmó que el cuerpo encontrado si es el de su hija.

 Durante los 13 días de búsqueda, las autoridades de Nuevo León encontraron 5 cuerpos más. 5 CUERPOS MÁS!!!! Definitivamente vivimos en un país que no tiene el menor respeto por la vida de las mujeres. Vivimos en un país en que es peligroso ser mujer, en el que las autoridades no hacen lo que les corresponde hacer, en que los feminicidios siguen a la alza y nadie es capaz de detener esta inercia (o nadie quiere hacerlo).

 La Fiscalía de Nuevo León ya había buscado en las inmediaciones del Motel Nueva Castillo; ‘por qué, entonces, no encontraron su cuerpo antes? Esto nos pone a pensar, ¿en verdad hacen su trabajo o simplemente pierden el tiempo disque trabajando?

 No conocía a Debanhi, antes de su desaparición ni siquiera había oído hablar de ella, pero hoy tengo el corazón triste, por ella, por una joven que tenía toda su vida por delante y alguien se la arrancó amparado en la impunidad prevaleciente. Tengo el corazón triste por todas esas mujeres que han sido asesinadas en un México feminicida, en un México que no tiene autoridades capaces para detener esta violencia, en un México cuyas autoridades dividen y humillan, en lugar de buscar unir y sanar; en un México donde la procuración de justicia no es prioridad, donde sus Fiscalías, tanto las locales como la Federal, no hacen bien su trabajo.

 Estoy triste, no lo puedo negar y, por supuesto, también estoy preocupado. Ya no hay un rango de edad específico en las víctimas de feminicidio. Hoy cualquier mujer está en riesgo. Tengo madre, esposa, hermana, sobrina, muchas primas, amigas, compañeras. ¿Qué seguridad tienen ellas? ¿Su único delito es haber nacido mujeres? ¿Así de jodido está nuestro país?

 Con estas interrogantes, con todas las noticias que vemos día a día, con la ineptitud y corrupción existentes, sí, hay veces en que me da vergüenza decir que este es mi país, que ésta es su gente. Hay momentos en que me cuesta creer que somos más los buenos; las cifras parecen indicar lo contrario. Recuerdo que hace muchos años había un anuncio de Bimbo con una canción interpretada por Pedro Fernández. La letra decía “Este es mi país y esta mi gente, gente buena que trabaja, que lucha y que siente”. Hoy, desgraciadamente, veo que no, no somos gente buena.

 Este es el México en el que vivimos: un México donde las autoridades están más preocupadas por pelear entre ellas, por atacarse en lugar de dar los resultados que, como autoridades están obligados a dar. El partido oficialista y los partidos de oposición están enfrascados en señalarse los unos a los otros como traidores, pero, ¿y los resultados?

 La seguridad en México ha sido una tarea pendiente en las últimas administraciones. Esto no se trata de fobias ni filias. El gobierno, emanado desde el partido que sea, ha quedad corto en cumplir su obligación de garantizar a los mexicanos, específicamente a las mexicanas, la seguridad que merecen. Una muestra: en lo que va del año, han desaparecido más de 70 mujeres.

 Solo tengo una última pregunta: el caso de Debanhi fue demasiado mediático. Durante su búsqueda se encontraron 5 cuerpos sin vida, pero, dejando de lado esta publicidad, ¿cuántos cuerpos más existen de los que no tenemos conocimiento?

 Twitter: @Benjamin_Muniz